Con emoción, Anderson Iván Contreras Morales, afiliado del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), agradece la atención médica que recibió por tres meses en el Hospital Dr. Juan José Arévalo Bermejo, zona 6, tras superar  un cuadro clínico grave de apéndice perforado que puso en riesgo su vida. 

Contreras Morales requirió a partir de enero 14 intervenciones quirúrgicas para evitar que una peritonitis causada por el apéndice perforado le complicara su cuadro clínico, a tal punto de que su vida peligraba, pero el trabajo del equipo médico y paramédico del hospital permitió que el paciente se recuperara y se encuentre en condición estable.

El paciente estuvo recluido en al área de intensivo, pues requirió de múltiples transfusiones de sangre acompañadas de un sistema de alimentación especial, tratamientos de terapia respiratoria, de movilización y cuidados de piel, así como apoyo emocional tanto para él como para la familia, de acuerdo a lo explicado por la doctora Elsa Mazariegos, jefe del servicio del intensivo.

Contreras, de 25 años, es originario de Los Amates, Izabal; ingresó el 3 de enero y saldrá del centro asistencial este sábado 4 de abril.  “Estoy agradecido con los cirujanos, con el personal de enfermería, de terapia respiratoria y nutricionistas.  Estoy feliz, por fin voy a mi casa sano y salvo, es una bendición, gracias a Dios y gracias al IGSS por darme siempre el apoyo y todo lo que hicieron por mí en esta etapa difícil que atravesé”, manifestó.

Pablo Ugarte, médico residente de medicina interna, expresó su satisfacción por la evolución del joven. “Él venía con el apéndice perforado, tuvo complicaciones isquémicas (disminución del flujo sanguíneo), pero afortunadamente, logró sobrevivir tras pasar tres meses en el intensivo”, informó el galeno.