El Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), a través del Hospital de Rehabilitación, ofrece a la población asegurada dos grandes áreas terapéuticas: física y ocupacional. Ambas funcionan gracias a la labor de más de 87 profesionales, encargados de evaluar y tratar a pacientes que han perdido habilidades motoras y de coordinación debido a un accidente o enfermedad.
En el área de terapia física se brinda tratamiento mediante termoterapia, hidroterapia, laserterapia, magnetoterapia, terapia de choque, entre otras. Además, el hospital cuenta con un gimnasio general y uno para casos específicos, una cancha para futbol y una para basquetbol, las cuales permiten llevar a cabo terapias grupales con mayor comodidad.
El fisioterapista Herbert Guevara valora el hecho de que además de presidir los ejercicios mecánicos y de gimnasia, también brindan un acompañamiento emocional al paciente. “Es una carrera muy humanitaria, pues ayudamos a encaminarlos de nuevo a sus actividades”, expresó.
En esta área se atiende a pacientes que presentan secuelas de accidentes automovilísticos y laborales
En terapia ocupacional se cuenta con 21 especialistas, cuya tarea es independizar al paciente en todas sus actividades de la vida diaria, por medio de técnicas que mejoren la funcionalidad de los miembros superiores, así como las áreas sensitivas y cognitivas.
“Me siento muy feliz y satisfecha de ser parte del proceso rehabilitador de cada uno de nuestros afiliados”, expresó Mildred Siliézar, terapista ocupacional, quien destacó el apoyo que brindan en la recuperación de la independencia de los usuarios.
Para esta tarea se ha habilitado una área de Xbox, talleres de carpintería, reparación de calzado, sastrería, cuidado del cabello y enseñanza para trabajar uñas acrílicas, además de un laboratorio de computación donde se enseña desde leer hasta el uso de algún software.
La doctora Karina Rodríguez, director médico hospitalario de dicha unidad, indicó que los terapistas constituyen el 25 por ciento del recurso humano y atienden a 9 mil usuarios (de todas las edades) cada año.
“Estoy muy agradecido con las personas encargadas de la fisioterapia, que ponen tanta dedicación en el desarrollo y la evolución de uno”, expresó Freddy Orellana, un afiliado tratado por el síndrome de Guillain-Barré.
