Las fiestas de fin de año trajeron consigo una variedad de comidas que, ingeridas sin control, pueden llegar a afectar la salud. De esa cuenta, vale la pena tener en mente que los azúcares refinados, como los jugos y las golosinas, se componen de calorías vacías cuyo poco o nulo valor nutricional contribuye al aumento de peso.
Esa es una razón fuerte para comer frutas y vegetales en abundancia y combinarlas en recetas atractivas en este nuevo año.
De acuerdo con la doctora Blandina Solís, de la Unidad de Consulta Externa de Enfermedades Autonomía, ambos contienen nutrientes como las vitaminas, minerales y fibra. “Se recomienda mantenerlos frescos y que no los sometan a cocciones a altas temperaturas por largo tiempo, pues sus pierden sus propiedades nutricionales”, señaló.
Solís compartió algunas combinaciones que no deben hacerse en un plato:
- No consumir alcohol con alimentos que contengan vitaminas A y E, este tipo de bebidas impiden su absorción
- No beber agua, u otros líquidos, mientras come porque la digestión se vuelve muy lenta. Es mejor hacerlo al final de las comidas
- No se recomienda combinar espinaca con quesos, ya que estas tienen un compuesto llamado oxalato que impide la absorción del calcio
- Tampoco es aconsejable mezclar leche y sus derivados con algunas leguminosas, como la lenteja, pues las proteínas y grasas de los lácteos, junto con la fibra de la lenteja, ocasionan flatulencias y malestar estomacal
- No es aconsejable mezclar sabores ácidos y dulces, porque eso provoca una alteración del ácido clorhídrico (acidez), lo cual hace que el organismo absorba con lentitud los alimentos, que dé hiperacidez, regurgitación o reflujo
Por último, la experta recalcó que para gozar de una mejor calidad de vida es necesario comer alimentos verdes porque protegen el corazón, los morados el sistema urinario, los rojos tienen más antioxidantes y los blancos mantienen bajo control los niveles de colesterol.
