Cada año, el 16 de octubre se celebra a los responsables de aplicar la anestesia, un compuesto medicinal que elimina la sensación de dolor durante una operación o examen, hablamos del anestesiólogo, quién además de aplicar la anestesia, debe supervisar al paciente durante todo el procedimiento, para monitorear los signos vitales y las reacciones del organismo.

El Día Mundial de la Anestesia nace el 16 de octubre de 1846, cuando los médicos del Hospital General de Massachusetts demostraron el uso del éter por primera vez en un paciente, cambiando para siempre el trabajo de la cirugía y demostrando que era posible someter a los pacientes a una intervención quirúrgica sin la tortura del dolor que en la antigüedad se asociaba con el procedimiento.

178 años han pasado desde aquel memorable día que trajo consigo innumerables avances para la humanidad, por ello, el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) reconoce la importancia y el impacto que tiene el personal de anestesia en los pacientes a los que atienden.

“Los anestesiólogos somos los encargados del cuidado del paciente y de la integridad del paciente, antes, durante y después de una cirugía” aseguró el doctor Juan Diego Arrivillaga, neuro-anestesiólogo del Hospital General de Enfermedades, quién además, reconoció la importante labor que realizan los anestesiólogos a nivel mundial, puntualizando que en su gremio “Son los encargados de vigilar que cada órgano y sistema del cuerpo funcione de forma óptima para que la cirugía pueda ser realizada de una forma segura”.

En esta importante fecha es importante conocer que existen dos tipos de anestesia:

  • General: que tiene efecto en todo el cuerpo, dejando al paciente sin ninguna sensibilidad e inconsciente por un tiempo.
  • Parcial:(como la raquianestesia y la epidural), con esta anestesia solamente “duerme” una parte del cuerpo. En el caso de la Epidural, el o la paciente puede o no estar consciente, la duración de cada una de ellas depende del tiempo que se necesite para hacer la cirugía.

Los riesgos de la anestesia, en la actualidad son casi nulas, gracias a las técnicas modernas, en este caso el profesional anestesiólogo es el encargado de reducir al máximo los peligros de accidentes o complicaciones, durante el procedimiento.