Ante la época de altas temperaturas, médicos del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) advierten sobre los riesgos y la importancia de tomar medidas preventivas para evitar efectos negativos para la salud.
El doctor Mynor Mejía, jefe de la Sección de Salud y Seguridad e Higiene y Prevención de Accidentes, explicó que un golpe de calor ocurre cuando una persona está expuesta a temperaturas ambientales altas y su sistema de termorregulación falla, lo que provoca un aumento excesivo de la temperatura corporal.

Esta condición puede generar alteraciones en el funcionamiento de los órganos y, en casos graves, puede derivar en un fallo multiorgánico, incluso la muerte.
“Los niños y los adultos mayores son los más vulnerables a experimentar descompensaciones por la insolación o al golpe de calor porque su organismo tiene menos capacidad para regular la temperatura, lo que los hace más susceptibles a los efectos del calor extremo”, explicó Mejía.
Para reducir el riesgo de una descompensación, el especialista recomendó:
- Evitar la exposición prolongada al sol, especialmente en las horas de mayor intensidad (10 a.m. y las 16:00 horas). Si está al aire libre en ese periodo, es importante que busque áreas con sombra.
- Usar accesorios adecuados como gorra o sombrero y utilizar ropa liviana, de colores claros y de manga larga.
- Tomar constante agua para evitar la deshidratación.
- Evitar las bebidas alcohólicas y con cafeína, ya que pueden contribuir a la pérdida de líquidos.
- Si planea asistir a procesiones, visitar la playa o realizar actividades físicas bajo el sol debe extremar las medidas, aplicando bloqueador solar, descansando a la sombra y mantenerse hidratado.

Síntomas de alerta:
- Piel enrojecida o seca, sudoración excesiva o ausencia de sudor.
- Mareos, debilidad, dolor de cabeza, náuseas o vómitos.
- Confusión o pérdida del conocimiento.
Ante la presencia de estos síntomas, se debe buscar atención médica, mientras tanto, trasladar a la persona a un lugar fresco, hidratarla y aplicar compresas frías en la cabeza y el cuerpo.

Nuestros especialistas instan a la población a seguir estas recomendaciones para evitar complicaciones de salud por exposición a altas temperaturas, y proteger especialmente a los grupos más vulnerables.