Cuidar en casa a un  paciente positivo  de COVID-19 puede ser una opción para quienes presentan síntomas leves. El enfermo debe recibir amor y aprecio, y no ser discriminado por la familia, recomienda el infectólogo Edwin  Cambranes, jefe del Departamento de Medicina Preventiva del IGSS.

El médico destacó que el aislamiento domiciliar conlleva la responsabilidad para proteger la salud, tanto del paciente como de las personas que están en su entorno.

La familia debe tomar las medidas higiénicas de desinfección y  procurar que sea una sola persona quien se dedique a cuidar al paciente.

Además, el cuidador debe evitar que el enfermo mantenga contacto con las personas vulnerables, entre ellas adultos mayores, embarazadas y enfermos crónicos.

El encargado debe tener el correcto lavado de manos de 40 a 60 segundos con agua y jabón o alcohol en gel antes y después de cualquier contacto con el paciente o ambiente.

Además, debe desinfectar con frecuencia los lavamanos, interruptores y chapas de puertas, sobre todo si el enfermo utiliza estas áreas. Para ello puede hacerlo con cloro.

Consulte aquí: Guía de Recomendaciones para el Paciente en Aislamiento en la Casa COVID-19

Aislamiento total

El paciente debe permanecer solo en una habitación ventilada hacia el exterior de la vivienda, a puerta cerrada, y debe contar con un recipiente de basura o bolsa; también debe usar mascarilla quirúrgica y mantener distancia de seguridad. El resto de la familia debe usar siempre la mascarilla.

En el caso de los objetos personales, los platos y cubiertos deben ser de uso exclusivo del enfermo. La ropa y las sábanas deben introducirse en una bolsa cerrada para lavarla lo antes posible.

Si es posible, el enfermo debe utilizar un baño de uso exclusivo  y  el cuidador debe limpiar las superficies con cloro.

Si el enfermo tiene fiebre o dolor de cabeza se le debe dar un analgésico y suficiente líquido para que no se deshidrate y debe tomar en cuenta que el medicamento debe ser  administrado en los horarios establecidos.

El doctor Cambranes indicó que si el paciente sufre fatiga, problemas para respirar y la fiebre en vez de bajar se agrava, deberá ser trasladado de inmediato a un hospital.