La nueva fase eruptiva del volcán de Fuego ha puesto en alerta a las autoridades debido al descenso de flujos piroclásticos, expulsión de material incandescente, explosiones, así como grandes exhalaciones de humo y ceniza.
Durante una erupción los fragmentos más pesados caen cerca del volcán y los más ligeros, como las cenizas, pueden alcanzar grandes altitudes y ser arrastrados por el viento sobre distancias de cientos y hasta miles de kilómetros, produciendo lluvia de cenizas sobre grandes extensiones.

En ese contexto las autoridades del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), hacen el llamado a los ciudadanos a estar al pendiente de los comunicados oficiales así como de las últimas noticias que se emiten a través de noticieros y medios oficiales.
Los expertos del Seguro Social dan una serie de recomendaciones para evitar afectaciones:
- No realice actividades al aire libre y si es posible no salga
- Cierre puertas y ventanas y coloque toallas o trapos en las rendijas
- Cubra los aparatos electrónicos, para evitar que la ceniza los dañe
- Barra y use pala para limpiar la ceniza de techos, patios, calles y deposítela en bolsas
- Nunca arroje las cenizas a los desagües para evitar que se tapen
- Se recomienda humedecer la ceniza ligeramente antes de barrerla, ya que si se barre en seco se levanta polvo

Los daños que puede causar la ceniza volcánica dependen de la distancia a la que uno se encuentre del cráter, y del espesor de la ceniza depositada en las superficies.
Recuerde que la ceniza está formada por fragmentos muy finos de roca parecidos al vidrio molido, por lo que es corrosiva e irritante. Por ello debe evitarse su aspiración y su ingestión.
Los flujos piroclásticos pueden producir caída abundante de ceniza, lo que podría afectar a los municipios de Alotenango, Escuintla, Siquinalá, San Pedro Yepocapa y Acatenango, no se descarta que los flujos puedan tener mayor alcance y afectar otras barrancas del volcán de Fuego.

Según La red de vigilancia volcánica del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanologia, Meteorologia e Hidrología (INSIVUMEH), reporta a través de los Boletines Vulcanológicos Especiales, la presencia de ceniza volcánica ya registra una altura máxima de 7 mil metros sobre el nivel del mar a una distancia de 50 kilómetros en dirección Noroeste, Oeste y Suroeste.