En el Día Mundial del Paciente Anticoagulado, la doctora Patricia Yax Rodas, del Hospital IGSS de Huehuetenango, destacó la importancia del control especializado para quienes utilizan medicamentos anticoagulantes. Este tratamiento previene eventos tromboembólicos, pero sin un monitoreo adecuado puede causar complicaciones graves como hemorragias, accidentes cerebrovasculares o embolias pulmonares.
La especialista explicó que estos pacientes requieren evaluaciones constantes porque los anticoagulantes modifican la coagulación sanguínea. Por ello, es necesario vigilar parámetros como el INR, ajustar dosis, prevenir interacciones con otros medicamentos y mantener hábitos seguros para evitar riesgos.
Las condiciones que con mayor frecuencia requieren anticoagulación incluyen fibrilación auricular no valvular, trombosis venosa profunda, embolia pulmonar, prótesis valvulares mecánicas y trombofilias hereditarias o adquiridas. En todos los casos, el tratamiento reduce la formación de coágulos, pero su uso sin supervisión médica puede resultar peligroso.
Yax subrayó que la prevención inicia en la vida diaria: asistir a controles médicos, evitar la automedicación, informar a todo profesional de salud sobre el tratamiento y utilizar protección en actividades que puedan provocar golpes o heridas. También recomendó portar identificación médica visible y mantener una dieta equilibrada, controlando alimentos ricos en vitamina K y aquellos que potencian el efecto del anticoagulante, como ajo crudo, jengibre, cúrcuma o alcohol en exceso.
Advirtió que suspender el tratamiento o no realizar controles puede causar dos riesgos principales: trombosis por falta de dosis o hemorragias por sobredosificación. “Ambas situaciones pueden comprometer la vida del paciente si no se detectan y atienden a tiempo”, afirmó.
Para fortalecer la atención, el IGSS ha implementado clínicas especializadas, protocolos de seguimiento, disponibilidad de anticoagulantes y acceso a pruebas como el INR, además de programas educativos que promueven un manejo integral y seguro.
Finalmente, la doctora Yax recordó que el tratamiento requiere compromiso: “El tratamiento anticoagulante salva vidas, pero exige disciplina. Informarse, asistir a los controles y evitar la automedicación son claves para vivir con seguridad y calidad”.










