El Hospital General de Accidentes “Ceibal” reporta un promedio mensual de 96 pacientes atendido por quemaduras. Según la doctora Jeane Fuenmayor, especialista en cirugía plástica y jefa del Departamento de Quemados, de enero al 5 de diciembre han atendido a más de 1,053 afiliados, derechohabientes, pensionados y beneficiarios del seguro social, por esta causa.

El Seguro Social realiza campañas de prevención para tener una fiestas sin accidentes.

Fuenmayor explicó que, durante las fiestas de fin de año, aumentan los casos relacionados con el uso de juegos pirotécnicos, así como los accidentes domésticos con caldos, ponche o comidas típicas de la temporada. Por ello, recomendó a la población extremar precauciones, especialmente con los menores de edad, quienes no deberían manipular pirotecnia bajo ninguna circunstancia.

Entre los casos más impactantes que recuerda la especialista haber atendido, durante su trabajo como cirujana plástica, es el de un niño que una “estrellita” quedó adherida a uno de sus ojos, lo que obligó a practicarle una intervención quirúrgica complicada. “Fue una situación difícil tanto para el menor como para su familia”, porque fue intervenido quirúrgicamente, relató.

La afiliada Elida Cumes compartió su experiencia. En septiembre de este año asistió con su familia al Festival del Pinol, tradición del municipio de San Raimundo. Aunque no estaban presenciando directamente la quema del torito, uno de los juegos artificiales impactó en el tercio medio de su pie, causándole una herida.

Pacientes del módulo de quemados advierten tener cuidado con líquidos calientes, ya que se quemaron la pierna y el pie.

La afiliada Cumes comentó que inicialmente no consideró necesario buscar atención médica, porque considero que no era algo tan grave. Sin embargo, ante la dificultad de caminar, decidió acudir una semana después a la Emergencia del Hospital, donde fue evaluada y atendida de inmediato. “Mi herida tiene el tamaño de una moneda de un quetzal, y es tan profunda que quedo muy cerca de mi hueso. Los médicos, me explicaron que el impacto del juego pirotécnico es similar al de una bala, y que la pólvora provocó la inflamación del tobillo”, explicó.

Motivo por el cual la asegurada hizo un llamado a la población: “Mi recomendación es que se cuiden y cuiden a los niños. Que no se acerque mucho a los juegos pirotécnicos y si es posible, que no los compren. No quisiera que alguien más pase por lo que yo viví; quedé traumada por lo sucedido”, aseguró.

Los menores no deben usar fuegos artificiales sin la supervisión de un adulto responsable.

Por su parte Roxana Gabriela Vásquez Plata Aguilar, con agradecimiento relató su historia debido a que se quemó los dedos, manos y brazos, por agarrar una olla de aluminio muy caliente, provocándole heridas de tercer grado, al momento lleva dos operaciones generales y entre sonrisas dijo que le han realizado otras pequeñas en los dedos, pero no se recuerda cuantas en total le han realizado. “Yo estoy muy agradecida, con las enfermeras, médicos y todo el personal de Ceibal, porque me han logrado curar, aunque aún me faltan más cirugías, confió en Dios y en los médicos porque han hecho una buena labor al atenderme”

Vásquez finalizó su entrevista con la recomendación de tener cuidado en las fiestas de fin de año para que no toquen recipientes calientes y acudan de inmediato al médico.