Durante la época de verano si ha decidido hacer un viaje familiar, visitar playas, ríos y balnearios o asistir a los cortejos procesionales, el IGSS le recomienda protegerse de las quemaduras del sol, de las enfermedades gastrointestinales, infecciones vaginales, el pie de atleta, la otitis, la deshidratación y de picaduras de insectos por ser trasmisores de enfermedades.
El doctor Edder Higueros, pediatra dermatólogo de la Unidad Periférica del IGSS Zona 5, aconsejó que para la fotoprotección las personas deben llevar siempre una sombrilla, utilizar camiseta de manga larga, lentes de sol y un bloqueador solar resistente al agua, que lo cubra de rayos ultravioleta de tipo A y tipo E, y que contenga factor de protección de 30 o más.
Los niños menores de seis meses no deben exponerse a la luz solar intensa y los de más edad pueden tener actividad acuática al estar protegidos con un bloqueador solar con filtros minerales.
Antes de meterse al agua los veraneantes deben darse una ducha y al salir, para desechar los residuos químicos. Para evitar la picadura de zancudos es importante que se cuente con un repelente cutáneo o utilizar un mosquitero para descansar bien por la noche.
Prevenga más infecciones
“Las visitas a playas o piscinas nos pueden predisponer a las mujeres a ciertas infecciones vulvo vaginales como una escaldadura o infección vaginal o urinaria, por ello es importante no vestir ropa mojada por mucho tiempo”, explicó la doctora Marisol Noriega, especialista en ginecología del Hospital Juan José Arévalo Bermejo.
Los niños menores de seis meses no deben exponerse a la luz solar intensa.
En verano aumentan los casos de infecciones gastrointestinales causadas por el consumo de alimentos no refrigerados, ya que el calor favorece el desarrollo de bacterias. La manipulación de los alimentos es otro factor para enfermarse. Además, los veraneantes deben mantenerse bien hidratados, tienen que ingerir al menos dos litros de agua durante el día.
Los pacientes que padecen de alguna enfermedad crónica no deben olvidar sus medicamentos y tomarlos en el horario estipulado por el médico tratante para evitar la descompensación en el organismo, y si el tratamiento es de cadena de frío se tiene que continuar con el proceso de congelación del medicamento, dijo el doctor Walter Nij, de la Unidad Periférica Zona 5.
