¿Sabía que algunas enfermedades se pueden prevenir o contrarrestar sus síntomas con mantener una alimentación sana?

Por ejemplo, ante padecimientos virales o secuelas del COVID-19  es importante, paralelo a las indicaciones del médico, apoyarse en los llamados alimentos funcionales, aliados que ayudan en los procesos de recuperación y fortalecen el organismo si se consumen de forma regular.

La doctora Blandina Solís, de la Unidad de Consulta Externa Autonomía del IGSS (COEX), compartió recomendaciones para una nutrición con esos objetivos, no sin antes explicar qué son los alimentos funcionales.

“Son aquellos que además de nutrir tienen propiedades especiales para beneficio de nuestro cuerpo, como por ejemplo modular la inflamación, subir el sistema inmunológico o mejorar la fluidificación de mucosidad”.

La profesional señaló que se debe aumentar el consumo de pescados por el omega 3 que contienen, ya que su ácido graso ayuda contra los procesos inflamatorios y contribuye a normalizar los niveles de colesterol.

Otros que aportan omega 3 al organismo están el salmón, el atún y la sardina, así como las semillas, entre las que destacan las nueces y chía, y los aceites elaborados a base de plantas, como el de oliva, linaza, soya o canola.

“Es importante consumir vitaminas A, E, D y K que se encuentran en alimentos de origen animal y las grasas, así como también el zinc”, agregó Solís.

Infaltables las verduras, legumbres, vegetales (ensaladas) y frutas, en especial aquellas que se caracterizan por sus colores intensos. “Estos alimentos son potentes en antioxidantes, vitaminas del complejo B y ácido fólico”, resaltó la doctora.

Agregue tés como los de manzanilla, jengibre y tomillo que ayudan como expectorantes a eliminar flemas, así como a aliviar molestias digestivas.

Además de mejorar la dieta, agregue estilos de vida saludables como practicar más ejercicio, entretenimiento social al aire libre y beber más agua pura para mejorar su calidad de vida.