Marcedonio Nájera López, de 56 años, más conocido por sus compañeros como Loño, originario de Sipacate, Escuintla, indica que durante 30 años formó parte del Cuerpo de Salvamento del IGSS y se desempeñó como salvavidas en playas del país, pero este año se retira.

Nájera López expresó que está muy agradecido con el Instituto ya que le dio la oportunidad de graduarse de abogado y notario de la Universidad de San Carlos de Guatemala.

Él comenzó su interés por la natación a los 15 años; se incorporó el 26 de junio de 1989 al Cuerpo de Salvamento, fue promotor de seguridad élite, jefe interino de ese cuerpo, colaborador en la capacitación de salvavidas, formó parte del personal fijo y supernumerario en la época de Semana Santa. Además, integró la terna evaluadora de salvavidas.

Loño resaltó la importancia del trabajo de prevención que realizan los salvavidas, debido a que muchas veces la imprudencia de los bañistas puede causar accidentes lamentables. Todas las recomendaciones deben ser atendidas, pues ellos conocen los riesgos derivados del comportamiento del mar.

Entre las principales recomendaciones para los bañistas están que no se internen al agua momentos después de haber ingerido alimentos, si se encuentran ebrios o si padecen problemas cardíacos.