El Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), a través del programa de Farmacovigilancia, garantiza la efectividad y seguridad de los medicamentos que se utilizan en el Instituto. Al detectar cualquier efecto adverso se investiga la posible falla hasta obtener una solución favorable para el paciente.
La licenciada Paola Lemus, del Área de Atención Farmacéutica de Farmacovigilancia en CAMIP Zunil 3, informó que la población asegurada puede manifestar sus dudas sobre la calidad del producto, así como informar sobre cualquier malestar que se presente al consumirlo (náuseas, mareos, taquicardia, picazón, entre otros).
Al recibir este reporte, el Departamento de Farmacovigilancia y el Comité Terapéutico Local y Central realizan una evaluación de la dosis del fármaco, la frecuencia del consumo y la interacción que puede tener con otros medicamentos. “Los beneficios son múltiples, pues se apoya en el seguimiento de las dudas hasta obtener una respuesta con base en la investigación hecha”, detalló Lemus.
La profesional explicó que se ofrecen diversas alternativas, como el cambio de medicamento o la entrega de un fármaco, en caso de que no hubiera posibilidad de hacer lo primero.
Se apoya en el seguimiento de las dudas hasta obtener una respuesta con base en la investigación
Asimismo, incentivó a los afiliados, beneficiarios y derechohabientes a que no se automediquen ni dejen los tratamientos a medias, sino que notifiquen las reacciones adversas al Departamento de Farmacovigilancia.
Cómo notificar las dudas sobre el medicamento
Debe acudir con el encargado de Farmacovigilancia de su unidad médica e indicar qué medicamentos está tomando y qué efectos cree que le está provocando. El siguiente paso es llenar el formulario SPS-1004, en el cual es necesario incluir sus datos personales, la información sobre los medicamentos y la descripción de la reacción o problema observado. Aquí puede descargar el formulario.
A partir de esta información se realizará la investigación y se le ofrecerá una solución según el caso.