Por Margarita Girón

El pasado 29 de octubre, la Junta Directiva y la Administración del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) realizó la presentación de los trabajos de restauración del mural del artista Carlos Mérida “La Seguridad Social”, considerado patrimonio nacional de la cultura, ubicado en las oficinas centrales del Instituto.

Según detallaron, los trabajos se iniciaron en diciembre del año 2018, a través de tres fases que incluyeron la pre consolidación, consolidación y restauración del mural en las que los arquitectos Roberto Barillas y Rodrigo Álvarez, trabajaron por diez meses.

También explicaron que, la obra de Mérida busca transmitir la maternidad y hospitalidad, que es la función de esa Institución, así como los beneficios a la comunidad. Además de una representación de cómo también el hombre, bajo sus atributos físicos y espirituales, recibe la protección y cuidado de la Seguridad Social.

La obra representa la historia de la Seguridad Social, es reflejada por un estanque y acompaña a los visitantes hasta la puerta de ingreso a las Oficinas Centrales del IGSS.

Para Rodrigo Álvarez, uno de los arquitectos a cargo de los trabajos, la mural alegoría a la Seguridad Social fue colocado en un lugar específico destinado a que se integre totalmente al ambiente en el cual fue erigido, un equilibrio justo que las tres artes hermanen, y así colaboran con la totalidad del conjunto y al mismo tiempo mantienen cada una su propia personalidad.

“Como obra de arte debemos considerar los años transcurridos desde su creación, incorporándolo en su realidad actual, aunándose en su evolución conceptual y legibilidad como obra de arte, propiciándose una puesta en valor en los últimos años”, agregó Álvarez.

SOBRE EL MURAL

El mural de Mérida se encuentra en uno de los edificios del IGSS construidos en la década de los 50, obra de los arquitectos Jorge Montes Córdoba y Roberto Aycinena, inaugurado el 1 septiembre de 1959.

De acuerdo con la información, Carlos Mérida defendió “la teoría del muralismo funcional”, reflejada en los edificios que ubicados en el Centro Cívico.

“La mural alegoría a la Seguridad Social fue colocado en un lugar específico destinado a que se integre totalmente al ambiente en el cual fue erigido, un equilibrio justo que las tres artes hermanen, y así colaboran con la totalidad del conjunto y al mismo tiempo mantienen cada una su propia personalidad. Esta obra de arte se puede interpretar según la propia experiencia”, destacó Álvarez.

Uno de los edificios construidos en esa época de los 50 es el del IGSS, obra de los arquitectos Jorge Montes Córdoba y Roberto Aycinena, inaugurado el 1septiembre de 1959.

La obra representa la historia de la Seguridad Social, es reflejada por un estanque y acompaña a los visitantes hasta la puerta de ingreso a las Oficinas Centrales del IGSS. FOTO/IGSS

EL PROCESO DE RESTAURACIÓN

Según la descripción de los trabajos realizados en el mural, se construyó una pileta frente a la obra, cuya finalidad es que el agua proteja el mural para evitar que desprendan piezas (teselas, aluminio) “también le sirve de espejo de agua, para ser reflejado y junto con el viento que corre usualmente de norte a sur lo convierte en un mural vivo”.

Además, detallaron que la base donde está colocado el mural es una estructura de concreto reforzada de 33.75 metros de longitud por 3.65 metros de alto por un espesor de 28 centímetros. Está sostenido por seis columnas de concreto con un refuerzo de 25 centímetros de diámetro.

En la parte posterior se encuentran siete vigas amarradas a las columnas principales del edificio, para darle rigidez y estabilidad al mural. También se observa otro mural, que puede apreciarse desde el interior del lobby del edificio.

Sobre estas superficies fueron colocadas en ambos lados millares de teselas de mosaico veneciano. Y por último se le colocó un filete de aluminio en todo su perímetro para su protección.

“Como obra de arte debemos considerar los años transcurridos desde su creación, incorporándolo en su realidad actual, aunándose en su evolución conceptual y legibilidad como obra de arte, propiciándose una puesta en valor en los últimos años”, añadió Álvarez.

El mural de Mérida se encuentra en uno de los edificios del IGSS construidos en la década de los 50, obra de los arquitectos Jorge Montes Córdoba y Roberto Aycinena, inaugurado el 1 de septiembre de 1959.
FOTO/IGSS