El laboratorio de la Unidad Periférica Zona 11 del IGSS a partir de febrero empezó a utilizar un código QR para que los pacientes que llegan por una prueba de diagnóstico de COVID-19 PCR (Polymerase Chain Reaction) puedan tener acceso al resultado de forma rápida y sin necesidad de esperar dentro de las instalaciones.

El equipo de alta tecnología permite que 30 muestras moleculares sean analizadas al mismo tiempo en un período de seis horas al mismo tiempo y confirmen si la persona es positiva al virus. El licenciado Alejandro Rivera, jefe del laboratorio clínico, explicó que con esta metodología el afiliado puede imprimir el resultado si necesita presentarlo en el lugar que labora y en caso de ser positivo alguien más puede venir a recoger su kit de tratamiento.

El área de hisopados de la unidad mantiene su servicio las 24 horas de lunes a domingo. A todas las personas se les realizan pruebas rápidas las cuales brindan un resultado preliminar en 15 minutos. Posteriormente, en las clínicas instaladas, los médicos evalúan a los pacientes que dieron un resultado negativo pero que de acuerdo a los síntomas y el protocolo puedan confirmar el diagnóstico con una prueba PCR.

El laboratorio de la Unidad Periférica Zona 11 atiende a más de 90 mil personas al año

“Eso ayudó a desfogar el área de diagnóstico. Antes el paciente debía esperar su resultado, pero ahora regresa a casa y en su teléfono puede descargar la información”, enfatizó Rivera. Desde que el laboratorio de la Unidad Periférica se implementó el 2 de febrero pasado ha emitido más de mil 600 códigos QR con los resultados de pruebas PCR.